Todos los elementos de la construcción que tengan un desempeño frente al fuego tales como muros y entrepisos se ven comprometidos en su desempeño, al tener aberturas o penetraciones causadas por el paso de instalaciones hidráulicas, eléctricas, de gases, climatización, entre otros.

Al no estar selladas, este tipo de instalaciones favorece la propagación del incendio y por lo tanto debe preverse un correcto sellado tanto de las aberturas, como de las instalaciones que son combustibles.

Igualmente las aberturas en las edificaciones que conforman juntas sísmicas, de control o de dilatación entre muros y/o entrepisos resistentes al fuego deben igualmente ser selladas apropiadamente con sistemas diseñados para tal fin, de modo que garanticen la movilidad de la junta así como la resistencia al fuego requerida por la norma local.